Hablar de relojes digitales es hablar de Casio. La marca japonesa ha dejado una huella imborrable en la historia de la relojería moderna, popularizando el uso de relojes electrónicos, resistentes y asequibles desde hace más de cuatro décadas. Pero más allá del F91W —el modelo que todos reconocen— Casio ha construido un legado basado en la innovación, la variedad y la durabilidad.
En este artículo repasamos brevemente el origen de Casio y exploramos las principales líneas que definen su catálogo hasta hoy.
Del ábaco al reloj de pulsera
Casio Computer Co., Ltd. fue fundada en 1946 por Tadao Kashio, un ingeniero japonés. Aunque la empresa inició fabricando calculadoras electrónicas, su gran salto a la relojería llegó en los años 70, cuando irrumpieron en un mercado dominado por relojes análogos y mecánicos.
Con el Casiotron, lanzado en 1974, Casio presentó el primer reloj digital con calendario automático. Era el inicio de una nueva era.
Las líneas más reconocidas de Casio
Casio Classic
Modelos sencillos, ultra confiables y con estética retro. Aquí viven íconos como el F91W, A158WA y variantes similares. Se caracterizan por su tamaño compacto, funciones básicas (hora, cronómetro, alarma) y precios bajos.
Ideal para: quienes buscan funcionalidad sin complicaciones.
G-SHOCK
La línea más robusta de Casio. Nació en 1983 con la visión del ingeniero Kikuo Ibe, quien quería crear un reloj “indestructible”. Los G-SHOCK ofrecen resistencia a impactos, agua (hasta 200 m), y una gran variedad de funciones avanzadas.
Subseries destacadas:
- DW-5600: el G-SHOCK “cuadrado” clásico.
- GA-2100 (CasiOak): estilo moderno y delgado.
- Mudmaster, Rangeman, Frogman: para uso extremo.
Ideal para: deportes, aventura y uso rudo.
Edifice
Relojes con apariencia más elegante y funciones más complejas. Algunos modelos tienen cronógrafos, Bluetooth y carga solar. Mezclan lo deportivo con lo sofisticado.
Ideal para: quienes buscan algo formal, pero moderno.